sábado, 9 de mayo de 2015

LA REAL PROFECÍA MAYA





EL DIOS PACAL Y EL KATUN TRECE






 Ahora conviene que extendamos nuestra mirada  sobre  Palenque. Hace tiempo estuve explorando aquella tumba maravillosa;  
 En realidad  de  verdad,  Palenque  ofrece  sorpresas magníficas.  En derredor de
 Palenque   pudimos   encontrar  toda   una  ciudad   funeraria;  lastima   que multitud   de  templos   y  sepulcros   estén  allí, aún  hoy  en  día,  cubiertos totalmente  por  la  selva.  Nos  maravillamos  de  todo  esto;  hubimos   de encontrar algunos relatos  maravillosos y extraordinarios, entre  la gente de Palenque.


Me viene  a la memoria  un caso  insólito, el de cierta  dama  de los Estados  Unidos. Ella llegó a Palenque  y consultó  a un amigo nuestro que desde hace muchos años vive allí, dedicado  exclusivamente a investigar  los asuntos  Mayas. La dama requirió los servicios de aquel hombre, experto  en tales cuestiones y éste, como es natural, no pudo  negarse  a servirle  en lo que pudiera. La dama le rogó que lo guiara y él se ofreció de buena voluntad a servirle  de guía. Más he aquí el caso insólito: en los instantes en que el guía se preparaba para subir al automóvil, ella lo detiene, diciéndole: "Usted es el guía, pero  va a tener  que  obedecerme; yo le diré  en q lugar  del bosque  necesitamos  detenernos".  Claro,  el  hombre   se  quedó  perplejo: "¿Cómo es posible que me pida de ga, y luego sucede  que es ella la que tiene  que  guiarme?   Al fin,  ¿quién  es  el  guía  de  quién?"  Subieron   al automóvil;  la dama, que era acompañada por su marido, llegando  a cierto lugar le ordena  detenerse, diciendo: "¡Aquí es!" Claro, nuestro guía estaba asombrado, no sabía de q se trataba. Baja ella del automóvil  y le pide al guía que baje también. El marido baja, echan llave al carro y ella dice: "Nos vamos a meter  derecho, aq por esta  montaña, y vamos a dar al lugar"...
¿Una dama recién llegada de los Estados Unidos, procediendo de esa forma?
Era como para  tener  al hombre  bastante mortificado, confuso (al fin y al cabo no sabía de q se trataba). La dama, delante  de todos, se abr paso entre  la montaña;  de pronto  se detuvo: "Aquí es!", dijo: luego levantó unas piedras, y ante el asombro del guía, apareció un esqueleto humano, entre un sepulcro...  "¡Vamos!",  dijo.  La siguieron   tanto   el  marido   como  el  guía. Volvieron a su automóvil, regresaron al poblado de Palenque, pagó al guía y se fue; nunca se supo s de esta dama.



En medio del bosque, lleg también  al lugar; obviamente, fue el guía el que me condujo al sitio y me dijo: "Aquí hay un centro magnético; ¿podría usted, Maestro, decirme  en q lugar de este sitio se encuentra el centro magnético?" Sentí, telepáticamente que el centro  magnético  se encontraba, precisamente, donde  estaba  el sepulcro, oculto  entre  las piedras. Le dije: "Aquí hay más fuerza magnética". "¿No hab por otro lado?", dice el ga. "Bueno, vamos a dar la vuelta", le dije. Dimos la vuelta. "Aqestá el polo contrario del  centro   magnético",  dije...  Exclamó  el  ga:  "Vamos  ahora nuevamente al centro" y volvimos. Levantó las piedras  y apareció  el esque- leto; entonces  fue cuando el guía me contó la extraña  historia, que a la vez relaté a ustedes.


Hay muchos relatos interesantísimos en Palenque, que llaman mucho la atención. El guía aquel  está  en contacto  con los mayas, y resulta  muy interesante saber que gentes mayas aún vivan. Se le preguntó por ejemplo a un anciano: ¿cuando cree usted que llegará la gran catástrofe que amenaza al mundo Tierra? Respondió: "En el Katún 13". ¿Tu hijo lo verá? Respuesta: "No, mi hijo no lo verá". ¿Tu nieto lo verá? Respuesta:  "Sí, mi nieto lo verá"
¿En q año entra el Katún 13? Respuesta: "En el año 2.043".


Realmente  se aguarda  una  gran  catástrofe, y los mayas  están  bien informados. Alguien por ahí, cuyo nombre  no menciono, alta autoridad en cuestiones de  antropología meramente  oficial, profana, afirmó  que  "los mayas    no   tenían    conocimientos   astronómicos",   que   "eran    gentes ignorantes", pero la realidad  es que conocen la astronomía a fondo, detenidamente. Aún hoy  en  día  se  la  pasan  haciendo  grandes   cálculos matemáticos; los mayas  enseñaron al amigo mío, al guía, un sistema  por ejemplo  a base  de granos  de maíz y café, con el que  hacen  operaciones aritméticas en cuestión  de milésimas  de segundos.  Se presentó por a un gran  experto  en matemáticas, un gran  profesor;  mi amigo le dijo: "Usted pod usar  muy  bien  las  computadoras,  usted  es  un  profesor   de  ma- temáticas, pero yo lo reto a que hagamos una operación  matemática; voy a usar  los procedimientos mayas, con granos  de maíz y café y usted  use su computadora". El hombre  dijo: "Realmente usted pod saber  mucho, pero me está faltando  el respeto". "No señor, yo no estoy tratando de faltarle el respeto;  únicamente  quiero   demostrarle  a  usted   que  los  mayas   son expertos  en  matemáticas,  y  que  mientras  ustedes  manejan   una  com- putadora  para   hacer   sus   cálculos,   aquí   se   hacen   los   cálculos   más


rápidamente que en cualquier  computadora, y si quiere  usted, hagamos  el experimento"...  El  profesor   aquel,  lleno  de  tremendo  orgullo,  prefirió guardar silencio, y se retiró mirando  su reloj; "se le hacía muy tarde", dijo, y se fue.
Vean ustedes, pues, que los mayas no son ignorantes como suponen las gentes. Se equivocan: los mayas, realmente, se pasan el tiempo haciendo cálculos astronómicos, y saben que se acerca a la Tierra un mundo que los mismos  hombres de ciencia ya bautizaron con el nombre  de "Barnard  I"; ese mundo  pertenece a otro  sistema  solar, tiene  una órbita  enorme, y se acerca  peligrosamente a  nuestro mundo  Tierra.  Cuando  Barnard   I sea visible a simple vista, se producirán acontecimientos catastróficos extraordinarios; esto  no  lo ignoran  los  mayas. Entonces,  tal  como  está escrito  en  el Katún  13,  aquel  gigantesco  mundo, por  fuerza  magnética, atraerá hacia la superficie de nuestra Tierra todo el fuego líquido, brotarán volcanes por aquí, por acá, y se producirán terribles terremotos y grandes cataclismos; esto será, según los mayas, en el Katún 13 (o 2.043); se están preparando para  este  evento  y dicen:  "Mi hijo no lo verá, mi nieto   lo verá".


A que,  ellos  son  sabios  en  gran  manera.  De  acuerdo   con  sus doctrinas está escrito que "en el máximo de acercamiento de Barnard  I, se produciuna revolución  de los ejes de la Tierra, los mares  cambiarán de lecho y las tierras actuales  serán devoradas por los océanos, esto es, habun cambio  radical  de toda  la fisonomía  geológica de nuestro mundo". Lo más asombroso es que los mayas desde  tiempos  antiguos, enjuiciaron  a la humanidad actual; ellos dicen que "acercándose el Katún 13, se verán por las calles de todas las ciudades  del mundo, "hombres  de dos días" (homosexuales), que serían  la vergüenza  de esta  raza"  (escudriñando un poco sobre los citados "hombres  de dos días", vinimos al fin a descubrir que se  trataba de  homosexuales);  "el  mundo   todo  se pervertido  por  el homosexualismo y el lesbianismo"  (cosa  que  se está  cumpliendo  actual- mente).


El gran incendio universal, pronosticado por Nostradamus, ya estaba escrito en el Katún 13 de los mayas; ellos dicen que "el fuego como sangre arde por todas partes"  y que "quematodo aquello que tenga vida". Así es que los mayas no ignoran nada de todo esto, lo que está por venir.

rápidamente que en cualquier  computadora, y si quiere  usted, hagamos  el experimento"...  El  profesor   aquel,  lleno  de  tremendo  orgullo,  prefirió guardar silencio, y se retiró mirando  su reloj; "se le hacía muy tarde", dijo, y se fue.
Vean ustedes, pues, que los mayas no son ignorantes como suponen las gentes. Se equivocan: los mayas, realmente, se pasan el tiempo haciendo cálculos astronómicos, y saben que se acerca a la Tierra un mundo que los mismos  hombres de ciencia ya bautizaron con el nombre  de "Barnard  I"; ese mundo  pertenece a otro  sistema  solar, tiene  una órbita  enorme, y se acerca  peligrosamente a  nuestro mundo  Tierra.  Cuando  Barnard   I sea visible a simple vista, se producirán acontecimientos catastróficos extraordinarios; esto  no  lo ignoran  los  mayas. Entonces,  tal  como  está escrito  en  el Katún  13,  aquel  gigantesco  mundo, por  fuerza  magnética, atraerá hacia la superficie de nuestra Tierra todo el fuego líquido, brotarán volcanes por aquí, por acá, y se producirán terribles terremotos y grandes cataclismos; esto será, según los mayas, en el Katún 13 (o 2.043); se están preparando para  este  evento  y dicen:  "Mi hijo no lo verá, mi nieto   lo verá".


A que,  ellos  son  sabios  en  gran  manera.  De  acuerdo   con  sus doctrinas está escrito que "en el máximo de acercamiento de Barnard  I, se produciuna revolución  de los ejes de la Tierra, los mares  cambiarán de lecho y las tierras actuales  serán devoradas por los océanos, esto es, habun cambio  radical  de toda  la fisonomía  geológica de nuestro mundo". Lo más asombroso es que los mayas desde  tiempos  antiguos, enjuiciaron  a la humanidad actual; ellos dicen que "acercándose el Katún 13, se verán por las calles de todas las ciudades  del mundo, "hombres  de dos días" (homosexuales), que serían  la vergüenza  de esta  raza"  (escudriñando un poco sobre los citados "hombres  de dos días", vinimos al fin a descubrir que se  trataba de  homosexuales);  "el  mundo   todo  se pervertido  por  el homosexualismo y el lesbianismo"  (cosa  que  se está  cumpliendo  actual- mente).


El gran incendio universal, pronosticado por Nostradamus, ya estaba escrito en el Katún 13 de los mayas; ellos dicen que "el fuego como sangre arde por todas partes"  y que "quematodo aquello que tenga vida". Así es que los mayas no ignoran nada de todo esto, lo que está por venir.


Bien, estuve en el sepulcro  del Dios Pacal; me pareció extraordinario. Obviamente,  tiene  tal  sepulcro   una  gran  tapa  de  piedra,  debidamente burilada, cincelada;  Don Pedro  Ferriz,  distinguido   caballero  dedicado  a grandes  investigaciones,  en cuestiones de platillos voladores, hombre  serio en estos  estudios,  supone  que esa plancha  de piedra  que tapa el sepulcro, indica  que  el  Dios Pacal  de  los  mayas  era  un  astronauta o viajero  del espacio. En eso sí, a pesar  de que admiro  a Pedro  Ferriz, lamento  disentir con él, porque  estuve examinando cuidadosamente aquella gran plancha de piedra  y pude verificar, por mí mismo y en forma directa, que el Dios Pacal no era, pues, un habitante de otro planeta, como Don Pedro supone.


Aparece sobre  la piedra, que  pesa  varias  toneladas y que cubre  al sepulcro, una  gran  cruz  hecha  con cañas  de maíz, y esto  nos  invita  a la reflexión. Entre los Mayas, a como entre  los Náhuacs, Zapotecas, Toltecas, etc., el maíz es sagrado, alegoriza  o simboliza  a la simiente  humana. Por ejemplo, en China, la India, Japón, etc., la simiente  humana  está alegorizada o simbolizada  por  el arroz, y en los pueblos  cristianos de Europa  y del Medio Oriente, la simiente  fue alegorizada  o simbolizada  por  el trigo.  La cruz   hecha   de   caña   de   maíz,   obviamente  resulta    tremendamente significativa, pues bien sabemos  nosotros que la cruz es un instrumento de liberación, no únicamente de martirio. Realmente, la inserción  del Phalus vertical  dentro  del Cteis formal hacen cruz. Bien, y si tal cruz es hecha de cañas de maíz, nos está indicando  algo extraordinario; es obvio que en el ens seminis, dentro  del cual está contenido  el ens virtutis  del fuego, existen poderes extraordinarios. El ens seminis, o entidad  del semen, o esperma sagrado  del ser humano, contiene  poderes místicos trascendentales, formidables, que los mayas analizaron cuidadosamente en sus estudios, no solamente en Palenque, sino en Can Cún, en Chichen Itzá, etc.


Si la  gente  supiera   el  poder  que  existe  en  el  ens  seminis, jamás gastaría  esa energía  torpemente, en la satisfacción  brutal  de las pasiones animales; antes bien, aprenderían a transmutarla. Los mayas conocieron tal ciencia; ellos sabían, por ejemplo, que si no derramaban el vaso de Hermes es  decir,  si  no  cometían   el  error   de  eyacular   el  ens  seminis,  éste  se transmutaría en energía  creadora. A es como el cerebro  se seminiza, y el semen  se cerebriza;  como resultado o secuencia  de un proceder así, en el hombre  resulta  una tercera fuerza, profundamente divinal (me refiero  al fuego sagrado).  Cuando éste asciende  por la espina dorsal del hombre, nos


transforma  radicalmente y nos  convierte  en  verdaderos Superhombres, como el Dios Pacal.


Descendimos las escalinatas que conducen al sepulcro del Dios Pacal; una piedra  triangular sella la entrada (ahora  esa piedra  está colocada a un lado);  el hecho  de que  sea triangular esa  piedra, nos  invita  a pensar  en muchas piedras  triangulares de las catedrales góticas de Europa. Esa piedra triangular representaría, para  el mundo  cristiano, el Padre, el Hijo y el Espíritu  Santo, es decir, a las tres  fuerzas  de la naturaleza: Santo Afirmar, Santo Negar y Santo Conciliar. Obviamente, sin esas tres  fuerzas  no puede haber ninguna creacn; cuando esas tres fuerzas fluyen en direcciones diferentes, no hay creacn; surge una nueva unidad cósmica, se realiza una creación, cuando  esas tres  fuerzas  coinciden  en un punto  dado. Lo mismo sucede con el matrimonio perfecto: el hombre es la fuerza positiva, la mujer la fuerza negativa, y la tercera fuerza, el Santo Conciliar, concilia a los dos lados. Las tres  fuerzas, unidas, realizan  una  nueva  creación  y viene  al mundo  un nuevo  hijo, un nuevo  vástago. Los mayas comprendieron todo esto, y el que  la  piedra  que  sella  el sepulcro, que  sella  la entrada del sepulcro del Dios Pacal sea triangular, resulta interesante.


Hay un pectoral que aparece, muy bien hecho, sobre el pecho del Dios Pacal, con nueve collares; esos nueve collares representan al noveno círculo dantesco, "el pozo del universo"  dentro  del organismo  humano, "el pozo humano", los órganos creadores, e indican que el Dios Pacal era un hombre que  transformaba el esperma sagrado  en  energía  creadora; que  era  un hombre   completamente casto,  recto  en  el  sentido   más  completo  de  la palabra;  un hombre  que jamás  adulteró, que nunca  fornicó. En su cuello aparecen tres collares más, representando a las tres fuerzas primarias de la naturaleza y del Cosmos; indican que el Dios Pacal logró cristalizar,  en su naturaleza, la fuerza  del  Padre, la fuerza  del Hijo, la fuerza  del Espíritu Santo: el Santo Afirmar, el Santo Negar y el Santo Conciliar, es decir, que el Dios Pacal log darle forma a esas tres fuerzas dentro  de sí mismo.


El Dios Pacal tiene  diez anillos, uno en cada uno de sus dedos;  esto nos está indicando a los diez Sephirotes de la Cábala Hebraica, a un hombre que  se  llenó  de  extraordinarias  virtudes,   a  un  hombre   magnífico,  un verdadero Avatara o Mensajero  para  la humanidad de aquella  época;  un hombre que le entregó a los mayas grandes conocimientos.


En una de sus manos aparece  un cubo, una piedra cúbica, y en la otra una esfera. La piedra cúbica nos indica que, realmente, este hombre  era tan sabio que poseía la Piedra Filosofal, es decir, la piedra  de la verdad;  era un hombre  que había encontrado la verdad. Y en cuanto a lo otro, en cuanto a la esfera, nos  indica  que  era  un hombre  perfecto, un  hombre  que  había despertado su Conciencia, un hombre que gozaba de sabiduría infinita.


Pero hay algo que aterra en todo esto, algo que asombra, que espanta; resulta  que lo sepultaron con seis decapitados. Es una cuestión meramente simbólica, pero  los seis decapitados, sí son hechos  concretos;  decapitaron seis hombres y los enterraron con el Dios Pacal; claro que para transmitirle a la posteridad un mensaje. Sin embargo, debemos  reconocer que la forma de transmitir dicho mensaje fue muy sangrienta: seis hombres decapitados. Con eso quisieron decir los mayas que ese hombre  había eliminado  todos sus defectos  de tipo psicológico; porque  cuando  nosotros consultamos la Cábala Hebraica, vemos  la estrella  de seis  puntas  de  Salomón  Rey; seis puntas   son  masculinas,  y  las  seis  entradas,  entre   punta   y  punta,  son femeninas; las doce radiaciones se descomponen, mediante la Alquimia, en doce  Constelaciones  del  Zodíaco.  Bien,  pero  el  número   seis, indubitablemente, también  recuerda al "Enamorado"  al amor, a la pasión, etc., es  decir, que  ese  hombre  eliminó  de  mismo  todos  sus  defectos pasionales, todos los agregados  psíquicos que le apenaban; log la máxima perfección, y el testimonio para la posteridad fueron los seis decapitados. Si no se conociera  un poquito  de Cábala Hebraica, sería imposible  encontrar entonces  el significado de los seis decapitados.


¡Es tremenda la tumba  del Dios Pacal! El lleva una máscara  de jade, que ha sido reconstruida por  el Museo de Antropología;  esa  máscara  de jade nos está indicando, pues, que su rostro  era tan perfecto, que había que velarlo a los profanos  (un rostro  de un Hombre Dios)... Se construyó pues, todo un monumento para  enterrar, a ese gran Avatara o Mensajero  de los Mayas que se llamó "Pacal".


Pacal fue un hombre que trabajó con el maíz, es decir, con la simiente. En la plancha o tapa de piedra  que cubre la tumba  del Dios Pacal, aparece éste como descendiendo de la cruz; entonces  no es como Don Pedro Ferriz piensa, que está  este  hombre  manejando algún aparato capaz de viajar a través  del espacio. Aparece también  allí un mbolo del planeta  Marte, para indicarnos que  el Dios Pacal estaba  relacionado en alguna  forma  con el planeta   Marte;   s   no  quiere   decir   eso   que   fuera   habitante  o  un extraterrestre  venido   de  Marte,  sino  un  hombre   influenciado   por   la radiación  marciana, un hombre  de carácter enérgico, un hombre fuerte que supo  enseñar a  los  mayas  su  doctrina.  Investigando,  pues, todas  estas cuestiones mayas, todos estos aspectos  antropológicos, debemos  volvernos profundamente reflexivos.


Estamos en momentos en que la gran catástrofe se acerca; de acuerdo con los mayas: "antes de que esa gran catástrofe venga al mundo", dicen los mayas, "hab guerras  en toda la redondez de la Tierra", y esto también  lo afirman  las profecías  de distinguidos sabios. Guerras  estamos  viendo  por todas  partes:  el mundo  del Medio Oriente, por  ejemplo, se encuentra en estos  momentos abocado  a nueva  guerra;  calamidades las  hab y por montones, antes  del Katún 13. Pensemos  que el fondo de los mares  está agrietado; hay algunas grietas tan profundas, por ejemplo en el Pacífico, que ya ponen en contacto  el agua con el fuego líquido que existe en el interior del mundo: como consecuencia o corolario, en estos momentos se están for- mando presiones y vapores  dentro, en el interior de la Tierra; tales vapores y presiones originan de hecho tremendos maremotos y terremotos por aqy por allá. Obviamente, la Tierra está en una gran agonía; esto lo saben los científicos. Por  ejemplo, los  peces  del  inmenso  mar  se  están  agotando, debido a la contaminacn; los aires están contaminados y son muchos los seres humanos  que se están enfermando a causa de la polución ambiental... Dijeron ciertos hombres de ciencia que "si nosotros no logramos corregir el smog, antes  de cuarenta años habrá  perecido, por lo menos, la mitad de la humanidad. Las tierras se están volviendo estériles en estos momentos; ya no son capaces  de producir todo  lo que la humanidad necesita. Debemos saber que sobre la faz de la Tierra existen cuatro mil quinientos millones de personas, y las tierras cultivables, en estos momentos, están en agonía. Los frutos  de la tierra  han sido adulterados por los sabihondos; éstos  con sus sabihondeces, incuestionablemente han causado  gran daño: han injertado plantas  con otras  plantas, y aparecen frutos que alegran  la vista, pero que no  poseen  los mismos  poderes vitales  de los frutos  naturales, y es que resulta absurdo intentar corregir a la naturaleza; ella sabe lo que hace.
A que,  mis  queridos amigos,  después   de  haber   viajado  por  las tierras del Mayab y haberme enterado de lo que  le viene  al mundo, del Katún 13, he querido  platicar  con ustedes esta noche para decirles que los
mayas  no fueron  ningunos  ignorantes y que todos  los pueblos  de México estuvieron dotados de terrible sabiduría.





    El dios Pacal
                              Y Los 13 Katunes
     Melvin Sánchez
                         

LA PRESENCIA MELVIN

Mas allá de lo meramente físico...    M.A.S .                                                              Sab....